La historia del éxito de Daniel Swarovski

(foto: Liveinternet.ru)

Sobre Daniel Swarovski se ha escrito mucho, pero ninguna de las fuentes me llegaron a convencer como debe de ser (sólo un poco el sitio-web de OliverWebershop, que abajo hago referencia). Por mi admiración a Swarovski, concretamente como creó y desarrolló su empresa familiar, es que decidí traducir y recopilar las informaciones útiles sobre él, que les pueden servir para iniciar sus propios negocios en adelante. Espero que disfruten de la lectura y si quieren enviarme algunos comentarios, les quedaré agradecido.

Daniel Swarovski fue un músico fracasado, un brillante ingeniero y un gran hombre de negocios. Él creó el imperio, que superó guerras y crisis, hizo el trabajo anhelado de su vida: el negocio familiar, que prospera incluso después de su muerte, y lo más importante: hizo feliz a más de un millón de mujeres. Esta persona es verdaderamente digna de admiración.

Todo empezó en la lejana Bohemia del Norte (hoy República Checa)

Su infancia y la música

Daniel Swarovski nació el 24 de octubre de 1862, en el pequeño pueblo de Georgenthal. Fue muy oportuno que él haya nacido aquí, ya que estos lugares tenían fama por sus famosos artesanos de cristal. La familia Svarovsky se dedicaba al comercio minorista  de joyas de fantasía (bisutería) y adornos de vidrio. Daniel ayudaba a su padre en los asuntos del negocio, y fue aquí donde él adquirió todas las habilidades necesarias. Fue así como comenzó su historia de éxito. Pero su sueño era completamente otra, ya que él quería ser violinista. Su padre, además tenía un pequeño taller de vidrio  y desde pequeño le enseñó al niño a trabajar en la pequeña empresa familiar. Es muy probable que precisamente las clases de música hayan influido en él, en la creatividad en todo a lo que se dedicaba.

Como no llegó a ser violinista, Daniel partió a estudiar a París (Francia) para graduarse como ingeniero en óptica. En Viena, tuvo la oportunidad de visitar la Exposición Mundial de Electricidad en 1883, donde él se enteró de que se puede procesar el cristal con la corriente eléctrica. Fue en ese entonces que Swarovski empezó a pensar sobre el diseño de una máquina que sea capaz de procesar (tallar) piedras con gran precisión en una cadena transportadora.  Durante sus estudios se casó y empezó a pensar sobre el inicio de su propio negocio. En el transcurso de 8 largos años, el joven inventor diseño su máquina automática de tallado de cristales. Y, por fin, en 1891, hizo su primera máquina pulidora eléctrica, y en 1892, patentó su invento como aparato automático para procesar piedras de cristal con precisión sin precedentes. La perspectiva para emprender la fabricación masiva de tallado de cristales era muy engañosa, pero Swarovski no tenía dinero ni los conocimientos necesarios empresariales. Pasaron 3 años en la búsqueda de inversores y personas que desearan invertir dinero en la idea de joven. Sólo en 1895 apareció esta posibilidad, y fue así que el se trasladó de Bohemia a Tirol(Austria), y concretamente a la aldea de Wattens (además porque requería del agua para alimentar su máquina de pulir), donde fundó la planta para fabricar artículos de cristal. Conjuntamente con su socio, Daniel Swarovski fundó la empresa “A. Kosmann, Daniel Swarovski&Co.“, y se dedicó a la fabricación masiva de objetos de cristal parecidas a las piedras preciosas reales. Daniel nunca ocultó que sus productos no eran brillantes, a diferencia de su predecesor: George Frederic Strass (en cuyo honor, los fragmentos de cristal biselados recibieron el nombre de strass).

La elegancia y el brillo debajo de la cadena transportadora

la denominación de Swarovski apareció sólo en el año 1900. En ese entonces, Swarovski con sus tres hijos mejoraron la tecnología del corte, el tallado y el pulido del cristal, prácticamente hasta la perfección. Uno de los factores de su éxito, fue la honestidad. Swarovski no afirmaba que sus piedras son naturales, sino que sinceramente reconocía  que son sólo de cristal, pero que, sin embargo, han sido hechos perfectamente y que son de alta calidad. Pero las personas se quedan entusiasmadas. Las piedras del nuevo modelo han comenzado gradualmente a desempeñar la misma función que las mismas piedras naturales caras. Swarovski pudo inundar el mercado con adornos increíblemente hermosos  y de alta calidad y a precios bastante bajos. La elegancia, el lujo y el brillo mundano ahora ya empezaron a salir de debajo de las cadenas transportadoras.

Pero, en esto, Swarovki no se detiene: la creatividad y la visión para los negocios le obligan a seguir adelante. Swarovski pasa a una nueva etapa, ya que creó una nueva receta de fabricación del cristal supertransparente. La sosa, el minio (plomo rojo), la arena de cuarzo y la potasa, en ciertas proporciones, dieron resultados increíbles durante la cocción del cristal. Esta tecnología, hasta la actualidad se mantiene en la más estricta confidencialidad, siendo el sello distintivo de la empresa Swarovski. Gracias al cristal especialmente cocido, se logra crear los cristales de renombre mundial con dispersiones de fueguecillos y el juego increíble de brillante de la luz en cada arista.

Talentoso en todo

Daniel Swarovski no sólo fue un inventor talentoso y hombre de negocios exitoso, sino también un gran especialista en marketing. El desarrollo constante y el crecimiento de la producción obligan a la necesidad de la búsqueda de nuevos mercados de venta. Y el maestro del cristal da aún un paso más hacia el éxito de la prosperidad: envía muestra de cristales a París (Francia) y San Petersburgo (Rusia). Esta decisión no fue casual.

París, era la capital de la moda y la fundadora de todas las nuevas tendencias de la moda, y San Petersburgo, la capital de la riqueza y el lujo.  Y esto dió sus frutos: los pedidos de productos de la empresa llegaban de toda Europa. Fue en Francia, que por primera vez se comenzó a adornar la ropa con piedras artificiales, y la descubridora fue la misma Coco Chanel, que lanzó una nueva colección con el uso de los placeres del cristal. Siendo las pioneras de la moda, las casas de moda de París consolidaron la opinión pública con la idea de que el uso de las joyas de fantasía no era de mal gusto. De esta manera, en la moda entraron en boga el brillo y el centelleo brillante de las piedras, accesibles a la mayoría de la población.

La 1-ra Guerra Mundial

La Primera Guerra Mundial destruyó muchas grandes empresas industriales y asimismo empresas de joyería. La gente dejó de interesarse por las joyas. Mantener el negocio en flote  era muy difícil, pero, de esta situación Swarovski pudo salir airoso. Hizo una reorganización parcial y abrió una empresa de fabricación de materiales abrasivos Tyrolit. Se supuso que la empresa funcionaría, mientras el país no salga del régimen de guerra. Pero la empresa comenzó a generar ingresos bastante considerables y ayudó no sólo a sobrevivir en los años de la guerra, sino también a aumentar considerablemente el capital de la familia de Swarovski. Al término de la guerra, Swarovski vuelve a la fabricación de cristales (strasses)  para la joyería, y Tyrolit no dejó de existir, sino que es una rama separada de la empresa familiar. Desde 1937, el rey del cristal además patentó otra invención:  reflectores de vidrio para caminos y paneles reflectantes para carreteras. Así fue como apareció la siguiente dirección del negocio familiar de Swarovski, que en 1950 recibió el nombre de Swareflex. Y aquí Swarovski nuevamente acertó, porque su inventó adquirió popularidad y empezó a propagarse por todo el mundo, multiplicando los ingresos de la empresa familiar.

La 2-da Guerra Mundial

La 2-da Guerra Mundial no representaba un serio peligro para la empresa fortalecida de Swarovski, pero que todos modos hizo tambalear su estabilidad financiera. A Europa nuevamente no le interesaron los adornos. Pero Daniel Swarovski comenzó a suministrar sus cristales a EE. UU. que se enriquecía impetuosamente, lo que le deparó buenos ingresos y que aumentó considerablemente el capital de la empresa.

La empresa de reputación mundial

El fabricante de adornos de joyería de cristal Swarovski AG, es reconocido como el mejor en el campo de las piedras preciosas de imitación y es conocido en todo el mundo bajo la marca: Swarovski Crystal. En más de 30 países del mundo, esta producción no necesita ser presentada. Con los ingresos anuales de $2 mil millones, Swarovski provee al mercado el 80 % de cristales que se usan en la joyería. A partir de este año 2013, la empresa posee 75 fábricas con una plantilla de 23 mil empleados, que incluye en sí las marcas:  Swarovski Optik -que se dedica a la fabricación de aparatos ópticos de alta precisión, Tyrolit – que fabrica equipos abrasivos de pulir para el procesamiento de piedras. Swareflex – que desarrolla y fabrica marcas viales luminosas, y Signity – que fabrica piedras preciosas naturales y sintéticas con talla de precisión. Y todo esto fue creado por un sólo hombre – por Daniel Swarovski.

Pero en sí, ¿quién fue Daniel Swarovski?

¿Si fue Swarovski un mimado por el destino o simplemente un empresario genial, un generador inagotable de ideas exitosas o un inventor talentoso y un vendedor hábil a la vez? Posiblemente, la composición de su éxito incluye todos los factores mencionados. Porque esta persona fue un verdadero revolucionario industrial, que puso la fabricación de cristales en cadenas transportadoras. Swarovski pudo no sólo crear la empresa, sino también desarrollarla hasta escalas globales, haciendo participar en este negocio a toda su familia. Desde hace ya muchos años, la empresa Swarovski AG es familiar, tal como la concibió su fundador. Actualmente los dirigen los miembros de la dinastía de Swarovki.

…y los secretos!

Durante muchos años, otras empresas han tratado de revelarlos, pero todos fracasaron. Probablemente, nunca los revelarán, si se tiene en cuenta con que rigurosidad guardan sus secretos en la misma empresa. Sin embargo, hasta el día de hoy corren rumores de que ya se conocen algunos secretos de Swarovski. En particular, se sabe, por ejemplo, por qué los cristales de la empresa brillan así. La razón de esto es el contenido del óxido de plomo. Aproximadamente del 32 %. Por supuesto,  que es el mismo en los cristales (strasses) ordinarios. Pero, en menores cantidades. para ser más precisos, no más del 24 %.  Y finalmente, nadie ha anulado el pulido único de los productos de Swarovski.

En 1956 falleció Daniel Swarovski, pero su empresa familiar es tan estable que su pérdida no llegó a influir en el desarrollo del negocio.

6 hechos reales:

1) La mejor publicidad, en toda la historia de la empresa Swarovski, se considera que es la aparición en 1962, en el festejo del 45 Aniversario de John Kennedy, de la legendaria actriz Marylin Monroe con un vestido semitransparente de color a piel, cosido con 6 mil cristales de Swarovski.

2) En 1976, la empresa Swarovski lanzó al mercado el programa de fabricación de souvenires “Figurines“. Las pequeñas figuritas de animales de cristal  rápidamente conquistaron a los aficionados de lo bello. Los regalos se fabricaron en tiradas limitadas que rápidamente fueron a caer en manos de los coleccionadores privados. Pero eso sí, todas las instrucciones de la tecnología de fabricación y los equipos fueron destruidos, con el fin de evitar  la fuga de información y las falsificaciones. El primer representante de la colección fue un osito, que ahora es el símbolo de “Figurines”.

3) En 2013, la composición del Club de coleccionistas Swarovski -The Crystal  Society- incluye más de 500 mil personas de todo el mundo, y el precio de los ejemplares de colección, varía desde $30 hasta $600.

4) Para el centenario de la empresa, en la comunidad de Wattens, se aperturó el Museo Swarovski Crystal Worlds Kristallwelten. Este es uno de los museos más visitados y extraños de Austria. La misma entrada al Museo es una cabeza de un gigante con ojos en forma de dos piedras gigantescas, y de su boca fluye una cascada.   El Museo tiene la forma de un laberinto de 15 Salas Mágicas (ha sido visitada por más de 7 millones de personas), que se encuentra debajo de la tierra. Y aquí se encuentra la tienda más grande de Swarovski.

5) El famoso logotipo de Swarovski, que es un cisne blanco, con refracción de la luz perfecta de sus piedras en lugar de sus alas, se empezó a utilizar  en 1988.

6)  Los plusmarquistas del Libro Guinness de récords, entre los cristales de Swarovski, es el cristal más grande – de 310 mil quilates (de diámetro 40 cm y de 62 kgs de peso) – y del diámetro más pequeño de 0,8 mm.

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(Ref.: Revista Fxfactor;Mirpositiv.ru; Mama-rabotaet.ru; Internet)