7 hechos misteriosos sobre el Pentágono

7 hechos misteriosos sobre el Pentágono

El 15 de enero de 1943 en el condado de Arlington (Virginia), en las afueras de Washington, se concluyó la construcción del Departamento del Ministerio de Defensa de EE. UU. Probablemente, en la Tierra no existe otro edificio que sea capaz de competir en “misteriosidad” con el Pentágono. Todo se debe a su forma y …!

1. FEN-SHUI, O LUGAR PREFERIDO (SECRETO, OCULTO)

“En un bosque oscuro oscuro había una ciudadela oscura …”. Tal vez, dentro de 200-300 años así comenzará la “historia de terror”  sobre el poderoso departamento militar de EE. UU. Pero, lo cierto es que no había  ningún bosque. Pero sí había un cementerio y pantanos…

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Aproximadamente en los años de 1940, a la administración estadounidense se le ocurrió la loca idea de reunir a todo el personal del Ministerio de Defensa de EE. UU. en su conjunto en un sólo edificio. Y estos eran, ni más ni menos, 26 mil empleados repartidos en 17 edificios separados en el distrito de Columbia. Por otra parte, según un documento oficial, en la ciudadela futura debían de situarse cómodamente y simultáneamente 40 mil personas! ¡En Europa tomaba impulso la Segunda Guerra Mundial, a la que los estadounidenses podían unirse en cualquier momento, y aquí surgió esta idea! Esto, en cierto modo es ilógico: es decir que todos los jefes militares claves bajo un mismo techo. Incluso los altos directivos de Coca-Cola, que conocen al receta de la gaseosa, no vuelan en un avión. Sin embargo, los arquitectos inmediatamente después de la señal del presidente empezaron a buscar el territorio para la construcción de la ciudadela. En Arlington, en el suburbio de Washington, eligieron un lugar, que nunca había sido expropiado. A ellos posiblemente les envidiarían los maestros de fun-shui. Lo que más cautivaba era que el terreno estaba esbozado con 5 caminos, algunos de los cuales se cruzaban bajo un ángulo de 108 grados. A la mayoría, por supuesto esto muy poco le podía decir, pero los arquitectos, sin dudas, son fuertes en geometría, y ellos sabían perfectamente que las líneas rectas convergen bajo ese ángulo conformando un pentágono equilátero, que los antiguos griegos llamaban “Pentágono“.

Para nosotros seguirá así siendo un misterio, lo que fue primario:  el lugar, que encontraron los proyectistas, o el proyecto, para el cual seleccionaron especialmente el territorio. Es necesario decir que el lugar era bastante pantanoso, y que, además, cerca de él se encontraba el famoso  cementerio de Arlington, donde fueron enterrados soldados estadounidenses, que no es el mejor lugar para la construcción. Los maestros de fun-shui es poco probable que los hubiesen aprobado, pero el presidente de EE. UU., probablemente, sabía más que los geomancios chinos, porque el terreno para la construcción fue permitido. Lo único, que Roosevelt ordenó – a petición de su esposa – fue moverlo un poco, a media milla, el futuro edificio para que no oculte la vista desde el cementerio de Arlington a Washington.

2. LA SECCIÓN AUREA

Como se sabe, a la entrada de la Academia del filósofo Platón se encontraba el lema: “Si no es geómetra, no entrará”. Hoy en día, podemos decir seguros que los autores de la construcción del edificio del Departamento estadounidense, serían bien recibidos por los platónicos caprichosos.

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Pocas personas saben que el Pentágono hasta ahora sigue siendo el edificio más óptimo ergonómicamente. El edificio se cruza con diez corredores por el centro, que unen cinco pentágonos procedentes del centro. Así, cualquier empleado del Departamento militar estadounidense puede llegar a cualquier punto del edificio por el perímetro, en el lapso de no más de 7 minutos.

La ergonomía natural se relaciona con las propiedades de la misma figura geométrica. Por ejemplo, las diagonales del pentágono forman un pentagrama, y los puntos de intersección de las diagonales de un pentágono regular siempre son los puntos de la “sección áurea”. Además estos forman aun un pentágono más, que al trazar las diagonales ciertamente conforman uno más. Y así hasta el infinito. De esta manera, es como si el pentágono parece ser que consiste de un número infinito de pentágonos, que se forman mediante los puntos de intersección de las diagonales. Esta interminable repetición de la misma figura geométrica crea un sentimiento de ritmo y armonía, que inconscientemente se fija en nuestra mente.

3. EL OMBLIGO DE LA TIERRA

Sin embargo, es probable, que no sólo las ventajas ergonómicas indujeron a los militares estadounidenses elegir la figura de un pentágono regular. Aquí, un papel importante desempeñó el simbolismo. Nuevamente dirijámonos a Platón. El famoso filósofo, como cuerpo geométrico más perfecto, le llamaba al dodecaedro, figura compuesta por 12 pentágonos. Platón sostenía que precisamente esta figura su “Dios usó para la planificación del universo, en calidad de modelo”.

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En 2003, durante el análisis de los datos de la nave espacial WMAP, lanzada por la NASA, se planteó la hipótesis de que el universo es el espacio dodecaedral de Poincaré. Según los datos de la modelación matemática, los resultados de las observaciones testimoniaron que el universo es un conjunto de dodecaedros que se repiten infinitamente, es decir de poliedros regulares, cuyas superficies están formadas por 12 pentágonos.

Es curioso, que entre los teóricos de la conspiración haya surgido la hipótesis de que el edificio del Pentágono es sólo la parte visible de la construcción. Como si, la construcción, por completo, por la forma es un dodecaedro, sin embargo, el resto del cuerpo geométrico está oculto de las miradas bajo la tierra. Comprobar, claro está, esto no es posible de ninguna manera. Aunque cualquier incertidumbre excita las fantasías.

4. EL HORÓSCOPO DEL PENTÁGONO

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 Muchos expertos en el campo de la astrología han argumentado que para la construcción del Pentágono seguro que recurrieron a la consulta de los astrólogos. La construcción se planeaba comenzar el 11 de septiembre de 1941 y acabar el 15 de enero de 1943. Es curioso que los plazos fueron cumplidos por los constructores, como se dice, segundo por segundo, lo que por sí mismo es un caso excepcional, y en especial durante el tiempo de la guerra. Los astrólogos notaron en las fechas, del inicio y finalización de la construcción, alguna ley “estelar”. Su atención se centró al “planeta de la guerra”: Marte. La construcción se inició, cuando este cuerpo celeste se encontraba en su signo: Aries, y terminó cuando Marte estaba en su exaltación (osea en su máximo poderío): Escorpión. Es curioso que después de la entrega en servicio del Pentágono, el ejército estadounidense realizó sólo operaciones militares exitosas en la Segunda Guerra Mundial.

5. EL TRIPLE 11 DE SEPTIEMBRE

Esta fecha acompaña misteriosamente el Pentágono. En este día en 1941 comenzó la construcción del edificio, en 2001 el Pentágono fue atacado por un avión Boeing, y el 11 de septiembre de 2002 todo el territorio del Pentágono volvió a entrar en servicio. Una de las mejoras más importantes fue la renovación completa de las ventanas del edificio, sustituyéndolas con ventanas blindadas. Las paredes externas del edificio fueron reforzadas y hechas resistentes a la explosión. Fueron cerrados los ascensores que conducen  a la estación del metro y se aumentaron significativamente las medidas generales de seguridad.

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Los conspirologos tratan de encontrar en esta coincidencia leyes, no obstante revelar el misterio del factor “11 de septiembre” hasta ahora  nadie lo consiguió. Es curioso que algunas cabezas locas aficionadas a los misterios del Pentágono, prevén que en la “biografía” del edificio deben de ocurrir aún dos 11 de septiembre: para concluir simbólicamente el pentágono regular.

6. PERO, EN REALIDAD, ¿HUBO EL BOING?

Pero el misterio principal, que por lo menos, está en conocimiento del público, es el ataque terrorista del edificio del Pentágono, que ocurrió el 11 de septiembre de 2001. Según datos oficiales, en este día, a las 9:37:46, contra el ala izquierda del edificio del departamento militar estadounidense se estrelló el Boeing 757-200. En esta ala se encuentra el mando de las fuerzas navales. Parte del edificio se derrumbó y fue seriamente dañado. Es curioso, que en el momento del impacto justo en esta ala del Pentágono se realizaba su replanificación,  y la mayoría de los empleados fueron trasladados de él hacia otras oficinas.

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Casi en seguida, después del ataque, aparecieron decenas de comentarios que afirmaban que ningún avión se había estrellado contra el Pentágono. De acuerdo con los argumentos de los escépticos, los daños del edificio son mínimos después del ataque de la nave aérea del peso de 100 toneladas, que se desplazaba a la velocidad mínima de 300 km por hora. “En el suelo, frente a la pared, no sólo hay escombros, sino que también sobre el césped no hay rastros de la combustión del enorme volumen del combustible ardiente de los depósitos (hipotéticamente) destruidos del avión”, – escriben los expertos. Además, después de cualquier accidente de avión, incluso del más horroroso, siempre quedan restos reconocibles de partes del fuselaje. En el caso del Pentágono, de acuerdo con la información oficial, todos los restos del Boeing se fundieron durante el incendio que surgió. Milagrosamente quedó íntegro solamente la caja negra, cuyos registros demostraron que el avión fue secuestrado por los terroristas.

Algunos analistas plantearon la versión de que la naturaleza  de las destrucciones del Pentágono corresponde más al ataque de un misil crucero “Tomahawk” sin ojivas, sin cabeza nuclear (explosivos) de combate , ya que el impacto del avión con los depósitos casi llenos, dicen, debió prácticamente destruir por completo el Pentágono. Sin embargo, los empleados del departamento no comentan de ningún modo las opiniones de los diletantes. ¿Qué pueden saber las personas, incluso los mismos experto en explosivos, las propiedades sobrenaturales de la figura geométrica del pentágono equilátero? “¡Si no es geómetra, no entrará!”. Y además, cómo pueden explicar estos escépticos, hacia donde fueron a parar los pasajeros del avión, que supuestamente se estrelló?.

7. LA ARITMÉTICA ENTRETENIDA

Mientras el Pentágono se cueza en el espacio cerrado de una cantidad infinita de pentágonos internos, pentagramas, “condimentados” con secciones áureas, la gente desde su exterior en vano tratan de desentreñar sus misterios. A veces, insatisfechos por la información oficial del departamento militar de EE. UU., tienen que contentarse efectuando cálculos de numerología difíciles, que dan resultados divertidos. Por ejemplo, el Pentágono fue construido en 491 días. Si, por el método de Pitágoras, se suman estas cifras (4+9+1), obtenemos – 5 (el número de lados del pentágono). Y si seguimos con el mismo método de Pitágoras, y decidimos multiplicar los números (4Х9Х1), obtendremos: 36. Y si no nos tranquilizamos con este número, y calculamos la suma de todos los números enteros de 1 hasta 36, se obtendrá: 666. Los conspirologos sostienen que precisamente por este número los constructores trabajaban día y noche para no incumplir los plazos acordados. Pero así se puede acordar cualquier cosa.

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A propósito, el pentágono con el pentagrama inscrito en él era el símbolo de la famosa unión pitagórica mística fundada por el pensador griego antiguo. Así, los pitagóricos creían que su emblema no sólo simboliza la armonía del universo, sino que es capaz también de influir armoniosamente en el espacio circundante. Los límites de la influencia, por supuesto, dependen de las dimensiones del pentágono regular. Así, el perímetro de la figura geométrica de Arlington es de casi 1405 metros, que hoy es suficiente para influir en todo el mundo.

Por supuesto que en el mundo existen muchas obras con misterios,  pero al respecto ya escribiré mas adelante.

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Publicado por Mauritz.

(ref.: www.russian7.ru)

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