Idea № 294. La historia del niño Ryan Ross que se hizo millonario a los 8 años

Idea № 294. La historia del niño Ryan Ross que se hizo millonario a los 8 años

CarenaEsta idea increíble trata de la historia real del niño, Ryan Ross de Toronto (Canadá). Resulta que a la edad de 3 años él hizo una pequeña granja  de gallinas. A los 8 años era yá propietario de 4 negocios y su fortuna se aproximaba en ese entonces (por que ésta historia no es muy de actualidad, -pero sí que me imresionó-, y es por eso que decidí publicarlo!) a 1 millón de $ canadienses.

Su historia

1. De su granja de 60 gallinas, él se dedicó a vender, en el patio trasero de su casa, la docena de huevos a 3$, que al día ganaba cerca de 15$. Al cansarse del negocio de las gallinas, Ryan decidió dedicarse a otro negocio.

2. Empezó a cortar céspedes que por hora cobraba 20$, pero como era aún muy pequeño para manejar el cortacésped, recurrió a chicos más grandes a los que le pagaba 15$ la hora. De modo que él recibía neto 5$ por hora (o el 25% sobre el trabajo de otros), a pesar de que él no hacía nada, afirma su madre, Savannah Ross.  Semejante situación sucedió con el siguiente negocio.

3. Por su máquina de lavado profesional, Ryan cobraba 200$ canadienses por hora a su cliente, mientras que al que hacía todo por él, sólo le pagaba 100$ (en esta tercer negocio el yá ganaba un 100% del trabajo de otros!).  Y todas estas ideas fueron de él. Yo y mi esposo nos preguntamos cómo brillantemente él entendía todo el proceso del negocio, comento su madre.

4. Despues, todas las ganancias obtenidas, Ryan los invirtió sólo en inmobiliarias. Ahora el es propietario de 6 edificios en Ontario y en British Columbia, y su fortuna en ese entonces se estimó que era de 900 mil $. Ryan los compró  para su familia, y asimismo 4 mil libros para él, pero que hasta ese entonces no se compró el teléfono móvil, porque su padres no le permitieron.

Sus amigos de la escuela como antes no le creían que él se dedica al negocio, según Savannah Ross. Ellos piensan que él es un fanfarrón”. Pero las ambiciones del niño empresario van más allá de la compra de inmobiliarias.

“Yo deseo comprar ahora 2 equipos de la LNH de Hockey, decía él, para jugar en la Liga. “Ryan piensa que el Hockey es sólo entretenimiento, explicó su madre, pero él debe de comprender el negocio. Despues estuvieron en conversaciones con los directivos de los equipos. Ellos consideran que esta historia es muy graciosa”.

Conclusiones que coínciden con algunos principios de los millonarios:

*  Evitar el trabajo arduo,

* Nunca se debe de trabajar para otra persona, sólo para tí mismo,

* Crear sistemas y redes de comercialización y nunca buscar un empleo,

* Hacerse rico de forma simple.

Y para concluir: Por supuesto que el niño fue guiado por sus padres (la regla de inversión que aprendió de su madre fue las de las 3 cifras del 100% de las ganancias, es decir, 80+10+10:  donde el 80% era para el desarrollo, el 10% para para fines benéficos y el 10% para el propio gasto) y quizás aún por un mentor especial, ya que por la edad que tenía en ese entonces, legalmente no podía firmar documentos, etc…! De todos modos, esta historia invita a pensar para tratar de ayudar mejor a los hijos desde muy pequeños (Porque también es una forma de inversión!).

©Este contenido no es una copia, es una recopilación de distintas fuentes. Publicado por Mauritz.

(Se prohíbe copiar categóricamente, sin la referencia activa obligatoria a este Blog!)

(Ref.: www.brugalo.com, Internet)

Compartir en redes sociales

Deja un comentario.

Tu dirección de correo no será publicada.

*



Яндекс.Метрика