Andre Kukla: 11 trampas mentales que obstaculizan trabajar de forma productiva

Las 11 trampas mentales descritas en su libro (Stupid Things That Sane People Do to Mess Up Their Minds), por el filosófo y psicólogo André Kukla, son vías establecidas y habituales, por los que se mueve de forma dolorosa e infructuosa nuestro pensamiento, perdiendo una increíble cantidad de tiempo, absorbiendo la energía y sin crear ningún tipo de valor para nosotros ni para cualquier otra persona. Caemos en ellas automáticamente, sin tomar ninguna decisión consciente. Para deshacerse de ellas, sobretodo es necesario aprender a reconocerlas.

Las principales razones, por las que de vez en cuando caemos en las mismas trampas mentales, según el psicólogo, son tres:

a) No somos conscientes de lo que pensamos,

b) No entendemos hasta que grado son peligrosos y contraproducentes nuestros pensamientos,

c) Somos esclavos de nuestros hábitos, y sobre todo de los mentales.

Las 11 trampas mentales

1. Persistencia: es la continuación del pensamiento mental sobre todo en lo que ha perdido su valor.

2. Exageración: trampa en la que se cae cuando se aplica en el logro del objetivo demasiado esfuerzo de lo necesario.

3. Fijación o inmovilidad: trampa, con la que nuestro avance hacia una meta  se bloquea o obstruye. Cuando no se puede continuar algo, hasta recibir una llamada telefónica, o el permiso, o la expedición, etc. Es decir que en vez de hacer algo útil durante la espera, nos quedamos en estado suspendido o “colgado”, osea en estado de fijación o inmóvil.

4. Reversión: el contraste temporal de la fijación o inmovilidad, o la tentativa de cambiar el pasado. Es decir, lo que ya no se puede cambiar: “era que yo …”.

5. Adelantamiento: trampa en la que que se cae, cuando se hace algo muy pronto.

6. Detención o la dolencia de “hacer algo más todavía”: por ejemplo, cuando no se puede dejar de hacer algo, cuando es imprescindible hacer otra cosa de mayor importancia.

7. Retrasar: cuando se decide a hacer algo, pero que es difícil comenzar. Por lo que nos inventamos otras tareas insignificantes, que pueden  retrasar el inicio inevitable de la tarea. Es decir la costumbre de aplazar cosas importantes, por decir, para otro día o fecha.

8. División o separación: cuando se trata de hacer dos cosas al mismo tiempo. Pero que no se pueden hacer dos cosas a la vez, porque requieren la participación de nuestra conciencia.

9. Aceleración o rapidez:  en esta trampa se cae cuando se trata de hacer algo más rápido de lo necesario. La aceleración es el reflejo de la detención. Porque cuando nos aceleramos sin ninguna causa, no se presta el tiempo ni la atención debida a la tarea específica.

10. Reglamentación o la trampa de las prescripciones inútiles: las personas a menudo recurren a las prescripciones torpes e incómodas en situaciones en las que sería suficiente la espontaneidad, que no requiere ningún esfuerzo.

11. Formulación: la trampa de la pronunciación continua de los pensamientos que nos parecen verdaderos. O la descripción sin sentido de las ideas  y de lo que nos rodea. “Las trampas mentales se pueden evitar concentrándose con mucha seriedad en las tareas específicas”.

Por estas razones es que este libro es valioso, es decir desde el punto de vista del planteamiento y descripción de los problemas, porque el reconocimiento de la presencia de las numerosas trampas mentales nos induce a poner en orden nuestros pensamientos que siempre es útil. Y especialmente para aquellos que desean ser personas razonables.

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Publicado por Mauritz. Se prohíbe copiar, sin la referencia activa obligatoria a este Blog!.

(Ref.: Libro “Trampas mentales” de André Kukla; Hopesandfears.com; All-you-wish.com;  Lifedesign.ucoz.ru)